07 enero 2013

LA CURROESPAÑA QUE VIVIMOS


Estoy firmemente convencido de que España es el país más fuerte del mundo. Lleva siglos queriendo destruirse a sí mismo y todavía no lo ha conseguido.




El bético Curro Romero en la Feria

Corría el año 1966 cuando un redactor de El Correo de Andalucía por primera vez comparó al Real Betis Balompié con Curro Romero. Con el permiso de los verdaderos aficionados a la tauromaquia, les contaré que Curro fue siempre capaz de lo mejor y de lo peor.  Un matador que ha alternado en su carrera los más gloriosos triunfos junto con los más estrepitosos fracasos. Tan acostumbrados a sus espantás estaban sus incondicionales, que acudían  a la plaza provistos de rollos de papel higiénico que le arrojaban en sus malas y vergonzosas tardes. Aunque de vez en cuando, sólo de vez cuando, Curro destapaba el tarro de las esencias y cuajaba una de esas tardes que los aficionados califican de únicas e irrepetibles y de pronto todo le olvidaban y le perdonaban los ridículos y la autoridad le concedía laureles y vueltas al ruedo y trofeos y los periódicos sus portadas, sus retratos y sus elogios.


Real Betis en 1977

El sagaz redactor del diario sevillano popularizó una identidad de Curro con el Betis con la que toda su afición sintonizó desde el primer momento. El Betis de entonces, de hoy y de siempre ha llevado la irregularidad por bandera y seña de identidad. Un Betis que era capaz de ganar una Copa del Rey y descender a Segunda División al año siguiente. Un Betis que le endosa un 0-3 a domicilio al Barça y que cae al partido siguiente en casa con un tercera. Un Currobetis en suma que, como una mala mujer, arroba los sentidos de sus seguidores que, no sabiendo muy bien por qué, encuentran en esta conjunción de opuestos, el atractivo romántico y quijotesco que en el fondo mueve a su afición.

En mi opinión, nuestro país tiene mucho de Curroespaña. Porque nosotros los españoles somos un  pueblo realmente particular. Si repasamos la historia de nuestro país encontraremos sobrados ejemplos de que España ha sido siempre fiel a su modelo currista y que las situaciones y esperpentos que nos toca vivir a los de nuestra generación no son mas que remakes de viejos y muy trillados asuntos patrios que antes que nosotros sufrieron nuestros mayores. Esta España mía, esta España nuestra es capaz de lo mejor y de lo peor, hoy arriba mañana abajo, ganamos y perdemos la confianza en nosotros mismos con pasmosa facilidad. Un pueblo de gentes de probada valía y sobrados recursos, que al tiempo se deja gobernar por los más felones de entre ellos. Un pueblo siempre unido y siempre en discordia interna, dispuestos a acuchillarnos entre nosotros al día siguiente de unirnos contra un invasor. Un país donde muchos nacionalistas reniegan de él de continuo y que al mismo tiempo echan mano a la espada si oyen a un extranjero reírse de España. Desconcertantes ante el ojo exterior, fascinamos a los eruditos que nos estudian como el espécimen digno de figurar en la sección de rarezas.

Dignos la mayoría del Qué buen vasallo si hubiere buen señor, acostumbramos a nombrar y soportar gobernantes mediocres y corruptos al estribillo de vivan las cadenas. Tolerantes de la mediocridad ajena, olvidamos pronto los delitos del dirigente y los condenamos en el vecino. Aguantamos desempleos subsidiados y contemplamos a los insaciables y zafios poderosos recolocarse unos a otros para seguir robando allá si acá se les terminó el botín, más impunemente cada día. Confundimos la gallardía con la soberbia a la menor ocasión y somos miserables con la opinión ajena, sea esta política o religiosa. Esta España martillo de herejes y luz de la cristiandad que fue capaz de verter ríos de la sangre de sus hijos por un filioque e  incapaz de vivir sin la sombra de las sotanas, salvó también el culo a Europa con su afición a degollar turcos.

El convoy anual de la Flota de Indias,
protegido por la Armada


Amigos de esperar a que otros nos resuelvan los problemas, nos pasamos la vida mirando Guadalquivir abajo, esperando a que la Flota de Indias amarre como siempre en el Arenal, cargada de oros y de platas para tapar los agujeros un año más, mientras nuestra industria dormitaba tanto como nuestras infraestructuras y sistemas educativos, por caínes, envidiosos y miserables, por preocuparnos de eliminar toros de Osborne unos,  de manipular libros de texto otros o asesinarnos por un color de la bandera.


D. Estanislao Figueras, Presidente

Amigos de confundir el tocino con la velocidad y capaces de aburrir a un Presidente del Ejecutivo, tanto desafuero y extravagancia  llevaron a D. Estanislao Figueras a tomar desesperado el primer tren que salió de Atocha una mañana de primavera de 1873 y a no bajarse hasta París (porque el tren no llegaba mas lejos). Encontraron su dimisión sobre su mesa, ni explicarla quiso. Suyo fue el famoso grito a su Consejo de Ministros Senyors, ja no aguanto més. Vaig a ser-los franc: ¡estic fins als collons de tots nosaltres!, (Señores, ya no aguanto más. Voy a serles franco: ¡estoy hasta los cojones de todos nosotros!).  

Caricatura del Gobierno en La Flaca 1873
Engendramos y pagamos políticos vendedores de humo, que nos ofertan mercancías caducadas, ya probadas y rotas del uso, pero que consumimos como frescas, de buen grado, regodeándonos en nuestra ignorancia sobre autogobiernos, federalismos y derechos a decidir. Condenados a repetir nuestra historia, olvidamos pronto los desafíos cantonalistas que tanta sangre derramaron y tanto ridículo internacional nos granjearon. Capaces de conquistar medio mundo y defenderlo contra el otro medio, esta nación es también muy capaz de sajarse las carnes a sí misma y sorprenderse después si Jumilla amenaza con no dejar de Murcia piedra sobre piedra.

Buscadores perpetuos de nuestra particular concordia ordinum, por siglos hemos vibrado cada uno de nosotros en una particular longitud de onda, anulando mutuamente nuestras energías.


Los periodos republicanos abundaron en las
patrióticas representaciones alegórícas de España.

Pero… de vez cuando, solo de vez cuando, esas longitudes de onda se alinean y vibramos en la misma frecuencia. De vez en cuando este país unido toma conciencia de su propio potencial y entonces… Entonces este pueblo realiza hazañas prodigiosas que dejan asombrado al mundo. Es entonces cuando este país levanta la cabeza, se yergue y descubre que es mas alto, mas fuerte y mas poderoso de lo que imaginaba. Y lo que se olvida entonces son las rencillas, las infantiles discusiones y las inmaduras envidias. Entonces parimos lo mejor de nosotros, en nuestras empresas, en nuestros artistas, en nuestros científicos, en nuestro deporte y en nuestra cultura. Y entonces dejamos pequeña la marca España porque ninguna marca sustituye a la grandeza de un nombre y de una realidad que debería ser distinta, más igualitaria, más justa y más generosa. Algún día este país despertará y se sacudirá sus complejos ancestrales y perderá los miedos a sí misma y dejará de ver contradicciones donde no las hay. Dejará de suicidarse a diario con la palabra y con el gesto, para dar paso a uno de esos periodos en los que la nobleza y la razón nos gobiernen a cada paso.


Alegoría de España, con la Constitución y otras matronas,
 sobre el Congreso de los Diputados 1848

Confió en que este extraño y raro pueblo, esta Curroespaña nuestra, en tiempos tan odiada y tan temida por sus verdaderos enemigos, recuperará la confianza en sí misma, dejará de solazarse en su acomplejado victimismo y sacará adelante un futuro mas justo, mas próspero y mas humano. Confío en que nuestra amada Curroespaña destapará entonces el tarro de las esencias y callará asombrado el resto del mundo, en un silencio de abril en la Maestranza.

Terminaré recordando al difunto Indro Montanelli que sedujo mi mente de adolescente con la aventura de la Historia y escribiré en su honor que tal vez una de las desdichas de España sea tener un nombre y un pasado desproporcionados con la modestia de un pueblo que, cuando grita Yo soy español, español, español…, alude tan solo a un equipo de fútbol.

Que tengan buena semana.



Estoy firmemente convencido de que España es el país más fuerte del mundo. Lleva siglos queriendo destruirse a sí mismo y todavía no lo ha conseguido.

Otto von Bismarck (1815-1898)
Primer canciller de Alemania

1 comentario:

  1. Estimado Francisco:
    Comparto plenamente las cuestiones básicas sobre la dualidad en el pueblo español. Somos los mejores y los peores del mundo a la vez y eso no hay quién se lo trague. Eludiendo buscar en el papanatismo por cuestiones obvias, quizás habría que vincularlo a un problema de auto estima de proporciones colosales y digno de concienzudos estudios para la reflexión, con el espíritu de mejorar siempre. Yo mismo soy víctima de un problema de auto estima que me lleva a no dar valor a lo que hago, problema que sufro desde hace muchos años, aunque tampoco me preocupa en exceso. Para solucionar la dualidad solo queda la revolución individual porque las otras fracasaron todas como vengo expresando en mis libros. Pánico me da que vengan nuevos salvadores de izquierdas, derechas o simples descerebrados a vendernos humos. La defensa de la democracia siempre, aunque sea como mal menor. Es evidente que la categoría de la mayoría de nuestros políticos es infame y solo cabe pensar en que "no tienen nada mejor que hacer". Los verdaderamente llamados a dirigir las res pública debería ser los mejores, la aristocracia en el sentido etimológico griego, pero los mejores no pasan por encima de sus criterios morales y tienen muchas cosas destacadas que hacer. Solo espero y deseo que la Historia y la Justicia, ambas con mayúsculas, se encarguen de los mercachifles. Abajo te dejo unos versos de Azulpoesía que tienen que ver con esos chupopteros.
    Finalmente, junto a mi más sincera enhorabuena por tu artículo y agradecimiento por tus reflexiones, si me lo permites debo corregirte: hay un uso indiscriminado de la conjunción copulativa "Y". Entiendo que te traiciona el subconsciente porque crees que estás en tu época álgida de vida sexual y copulativa, aunque el físico no te acompañe. Así pienso porque no me gustan los hombres, lo siento.
    Un fuerte abrazo
    Fernando Lumbreras
    http://www.youtube.com/watch?v=5_WkxChXa1w
    www.azulpoesia.com

    Pd.: Te dejo esta perla apocalíptica para políticos y ciudadanos:

    Criaron las marismas tantos mosquitos,
    agotándose muy pronto la sangre que chupar;
    lloraremos casi exangües las dolorosas picaduras
    y puro lamento serán nuestros sentidos.
     
     
    Inútilmente pretenderemos cualquier auxilio,
    conociendo del mundo la cercana voladura;
    no habrá calma ninguna para tamaña desventura
    y mendigaremos hipócritas el perdón divino.

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